LAS PROVINCIAS
Un metro de la línea 1 con 100 pasajeros a bordo descarrila en Burjassot sin causar heridos
Ferrocarrils cree que la vía, instalada hace una semana, estaba dañada por unas obras de soterramiento
J. A. MARRAHÍ
VALENCIA
Otra vez la línea 1. Y otra vez el miedo entre las 100 personas que viajaban en un metro que ayer descarriló en Burjassot, muy cerca de la estación de Canterería. Ninguna de ellas resultó herida pero uno de los pasajeros fue atendido tras sufrir una crisis de ansiedad. Vio cómo el vagón en el que se hallaba se salió de las vías. Al descarrilamiento siguió un desagradable chirrido y una fuerte vibración que sacudió a los viajeros. La causa más probable de este nuevo siniestro es "un defecto en las vías", según las primeras investigaciones de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV).El siniestro se produjo sobre las nueve y media de la mañana. El convoy, formado por dos unidades, salió de la estación de Benimàmet, encaró una curva y estaba a punto de llegar a Cantería, situada muy cerca de la Pista de Ademuz.Su velocidad era de unos 20 kilómetros por hora, lo que evitó que el siniestro tuviera mayores consecuencias. Por causas que investiga FGV, cuando el último grupo de ruedas atravesó la curva, se salieron de los raíles. Esto hizo que el metro se escorara peligrosamente hacia la derecha durante un recorrido de unos 300 metros. El maquinista frenó, pero como el metro ya estaba desencajado de su vía tumbó parte de un muro de la estación de Canterería.Una vez parado, las puertas se abrieron y la mayoría de los pasajeros salieron por su propio pie. El muro destruido taponó algunas de estas vías de evacuación y fueron policías de Burjassot los que ayudaron a los más mayores a abandonar el convoy siniestrado. "Estaban muy nerviosos, pero ninguno resultó herido", explicó uno de los agentes que trabajó en la zona.Según fuentes de FGV, la causa del descarrilamiento podría estar en los trabajos de soterramiento de la línea 1 a su paso por Benimàmet, unas obras que se están realizando junto al punto del accidente. La principal hipótesis es que se dañara algún punto de la vía por este motivo.La empresa ferroviaria explicó que las vías de ese tramo se habían colocado hace aproximadamente una semana. Los expertos de FGV que examinaron el lugar del siniestro creen que, por causas aún indeterminadas, las vías "no estaban correctamente asentadas" en el terreno. Esto ocasionó un desnivel que, "si bien era de pocos milímetros", fue suficiente para ocasionar el descarrilamiento.Al lugar acudieron casi una veintena de agentes de Policía Local, Policía Nacional y Policía Autonómica. También se desplazaron bomberos y tres ambulancias. El personal médico atendió a un hombre de unos 50 años de edad que sufrió una crisis de ansiedad. No fue necesario trasladarlo a un hospital, indicaron fuentes sanitarias.En pocos minutos, un ejército de operarios de FGV se desplegó sobre la zona para analizar las causas del accidente y reparar las vías. El convoy siniestrado fue retirado y trasladado a talleres sobre la una y media de la tarde. El descarrilamiento del convoy dañó las traviesas y los obreros tuvieron que luchar contrarreloj, bajo un sol de justicia, para poder arreglar las vías y restablecer el tráfico en la zona. Al cierre de esta edición, estos trabajos estaban bastante avanzados. FGV prevé que hoy los metros puedan circular con normalidad.Pero ayer fue un día de infierno para los usuarios del metro. FGV habilitó un servicio de autobuses para trasladar a los viajeros entre las estaciones de Paterna y Empalme. Durante una hora, después del accidente, la línea 1 quedó completamente inutilizada debido a un corte de electricidad en la zona para los trabajos de reparación. Todo ello ocasionó retrasos de hasta media hora e incomodidades."Llevo 20 minutos esperando" Vicente Vozmediano, vecino de Burjassot, fue una de las personas afactadas por los problemas en el servicio. "Llevó más de 20 minutos esperando. Nos han prometido que nos van a traer un autobús pero aún no ha llegado. Tengo que ir a trabajar a Paterna, al polígono Fuente del Jarro, y voy a llegar tarde", lamentó el usuario de la línea 1.Las críticas a FGV tras el nuevo accidente del metro no se hicieron esperar. La portavoz adjunta del PSPV en Les Corts Valencianes, Carmen Ninet, cree que la Generalitat "incumple su compromiso de mejora de la línea 1 y mira para otro lado". El grupo municipal socialista del Ayuntamiento de Valencia también se sumó a las denuncias tras el siniestro y exigió a la alcaldesa Rita Barberá que inste a la Generalitat a mejorar la línea 1.El accidente más grave de la historia del metro en la Comunitat ocurrió el 3 de julio de 2006. Ese día 43 personas perdieron la vida al volcar un metro de la línea 1 cerca de la estación de Jesús.
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