MANIFIESTO CONCENTRACIÓN 84 PLAZA DE LA VIRGEN DE VALENCIA 19:00 H.
Hace un par de semanas, Nieves Molina manifestó su decisión
de rechazar la petición de la Fiscalía de reabrir la investigación del
accidente, por considerar que estos datos nuevos, no hubieran cambiado las
conclusiones del perito.
En cambio, el propio perito, dice que estos datos que FGV no le facilitó, eran necesarios para la realización de su Informe Pericial, para determinar si existían fallos estructurales en la UTA 3736, como deficiencias en las ruedas lo que le llevaba a descarrilar, o fallos en el sistema de frenado. También para aclarar el motivo del desprendimiento de los cristales.
Una nueva pericial determinaría si el estado de la unidad siniestrada pudo ser un factor a tener en cuenta en las causas que produjeron el accidente, y serviría para determinar qué personas pertenecientes a MetroValencia, debieron adoptar las medidas necesarias para garantizar que la unidad siniestrada circulara con plenas garantías de seguridad.
Pero Nieves Molina, arrogándose el papel de perito, y sin practicar una sola diligencia, insiste en defender que el accidente ocurrido el 3 de Julio de 2006, fue a consecuencia del exceso de velocidad, y que lo hecho, bien hecho está.
Aunque la actuación del juez instructor del accidente de Santiago, la deje en entredicho.
El mantenimiento de una feroz negativa a la instrucción, no favorece a nadie, ni la justicia ni a los destinatarios de la función jurisdiccional.
Lo que con el paso del tiempo se ha desvelado, las nuevas declaraciones del perito, el direccionamiento de la Comisión Parlamentaria, etc…. Hace que fluya de modo natural, la convicción de que la negativa judicial a la investigación sobre el accidente del 3 de Julio de 2006, no es una solución justa. Y eso puede percibirse como un insulto a la dignidad, no sólo de la AVM3J, sino de toda la sociedad.
Y eso es lo que denunciamos hoy en esta plaza, y así será hasta que se haga justicia con los 43 fallecidos y 47 heridos del accidente, y con toda la sociedad.
En cambio, el propio perito, dice que estos datos que FGV no le facilitó, eran necesarios para la realización de su Informe Pericial, para determinar si existían fallos estructurales en la UTA 3736, como deficiencias en las ruedas lo que le llevaba a descarrilar, o fallos en el sistema de frenado. También para aclarar el motivo del desprendimiento de los cristales.
Una nueva pericial determinaría si el estado de la unidad siniestrada pudo ser un factor a tener en cuenta en las causas que produjeron el accidente, y serviría para determinar qué personas pertenecientes a MetroValencia, debieron adoptar las medidas necesarias para garantizar que la unidad siniestrada circulara con plenas garantías de seguridad.
Pero Nieves Molina, arrogándose el papel de perito, y sin practicar una sola diligencia, insiste en defender que el accidente ocurrido el 3 de Julio de 2006, fue a consecuencia del exceso de velocidad, y que lo hecho, bien hecho está.
Aunque la actuación del juez instructor del accidente de Santiago, la deje en entredicho.
El mantenimiento de una feroz negativa a la instrucción, no favorece a nadie, ni la justicia ni a los destinatarios de la función jurisdiccional.
Lo que con el paso del tiempo se ha desvelado, las nuevas declaraciones del perito, el direccionamiento de la Comisión Parlamentaria, etc…. Hace que fluya de modo natural, la convicción de que la negativa judicial a la investigación sobre el accidente del 3 de Julio de 2006, no es una solución justa. Y eso puede percibirse como un insulto a la dignidad, no sólo de la AVM3J, sino de toda la sociedad.
Y eso es lo que denunciamos hoy en esta plaza, y así será hasta que se haga justicia con los 43 fallecidos y 47 heridos del accidente, y con toda la sociedad.